REY DE LA NOCHE.

Calzado caro, edad indefinida, cabello impecable, vestido oscuro, mirada decidida, dominio del lenguaje de la noche y toda la experiencia.

Rodeado de chicas hermosas, sin mover un músculo de su cara, y contestando siempre oportuno a las frases que a él van dirigidas. Sabe estar, y reír, y esconderse en cuerdas cuando huele las preguntas que no le gustan, y entre sus grandes manos el largo Jack siempre sostiene un copa de lo que sea que lleve alcohol.

División de opiniones sobre él, salvo que se lo monta de manera que no da golpe y que se relaciona con tipos decisivos de su ciudad.

Le temen, porque Jack es de no pasar desapercibido. No acierta con el amor, y sus preferidas tops no logran calmarle que únicamente sea su sed de deseo biológico e imperioso.

Dicen las malas lenguas que tras la seguridad de Jack hay en el interior de su lujosa mansión y en uno de los cajones de su despacho, una pistola siempre rodeada de las mejores e infalibles balas.

Y otros deciden y creen que el singular Jack solo es presa de un amor que murió porque se fue con otro tipo, y que fue la única mujer que le destrozó el corazón incluídas las dos ex esposas con las que decidió en tiempos casarse.

De momento para Jack no existe la luz del día que no sea para cosas realmente urgentes. A Jack, cual rey de la noche, solo puedes verle cuando la luz natural deja paso al neón, a la fiesta del exceso, y al buen sabor de la mejor y más potente bebida de evasión.

-LA QUE SEA-