Domeño Viejo

El Domeño que todos conocemos a día de hoy nada tiene que ver con Domeño Antiguo. Les separan en torno a 30 kilómetros. El motivo del cambio de ubicación es que, al construirse el embalse de Loriguilla en los años 70, había peligro de inundación, por lo que se decidió evacuar a la población. Esa inundación jamás sucedió. Allí solo queda un castillo musulmán, un gran salto de agua y el cementerio. En el cementerio han tenido lugar rituales que han alterado su fisonomía. Según una psicofonía de David Garcés, se puede escuchar “y los muertos también”. Cerca de allí podemos encontrar Loriguilla, otro pueblo rodeado de misterio en el que queda en pie la iglesia y donde, según cuentan, suceden muchos sucesos paranormales.

Se encuentra a la orilla de la cabecera del embalse de Loriguilla.